Cada vez es más importante el modo y la forma de comunicar, nuestro comportamiento ante las contingencias, la calidad, el producto y /o servicio y sobre todo la percepción que la ciudadanía y el consumidor tiene de nosotros.
El pasado 13 de junio el programa En Portada de televisión española (la televisión de todos los españoles todo un oxímoron) emitió un programa titulado «Bajo Plástico«. En este programa una vez más, se recurría al “Manual de la Cabaña del Tío Tom”, sobre la mano de obra extranjera, alimentado con medias verdades su versión de la situación. Por suerte (o por desgracia) TVE carecen de solvencia e impacto mediático.
Es obvio que el sector productivo almeriense, al igual que el de Huelva o Murcia nunca han gozado del beneplácito de la “Brunete Mediática”, al contrario que otras zonas con similar situación de temporeros como son la zona del Maresme o de Ibarra en el País Vasco, por poner un ejemplo a nivel nacional.
Si a la situación de hostilidad le sumamos que el consumo de hortalizas se ha reducido en España un 20,7 %, el de la fruta un 17,9 %, el pan un 13,8 % la leche un 10,1 %. Según fuentes del Ministerio de Agricultura la venta de alimentos ha bajado un 8,8 %.
La situación en los países de nuestro entorno es similar cuando no peor (Entornos B.A.N.I.).
El 33 % de las familias de nuestro país cambio los frescos por las conservas y el 19,8 % se focalizó en el consumo de ultra procesados. El 15 % de los consumidores están adquiriendo alimentos más económicos, en concreto pasta y arroz junto a precocinados en detrimento de verduras y frutas. El consumo «per cápita» de pescado ha descendido un 20 % al igual que la carne.
En el campo de la horticultura la publicidad está a años luz comparada con otros sectores, no es fácil convertir una hortaliza en un objeto de deseo. La atomización del sector productivo tampoco ayuda a la realización de campañas en post del consumo de frutas y verduras de Almería, por eso debería ser una organización compuesta por todos los estamentos del sector junto a las distintas administraciones públicas; estoy hablado de asociaciones de productores, organización interprofesional, sindicatos agrícolas, asociaciones empresariales, diputación, administración regional…
Debemos buscar la singularidad, apelar a nuestro modelo de vida y productivo basado en una agricultura ética y sostenible, responsable socialmente además de saludable para el consumidor, y es que ¿hay algo más saludable que el consumo de hortalizas y frutas?
Importante desarrollar un buen storytelling
¿Qué se pretende obtener con el storytelling? En nuestro caso sería el aumento en el consumo de frutas y hortalizas, por lo que es importante:
- Definir a que segmento de población queremos conectar a través de la historia que vamos a contar: Como piensan, que sienten, franja de edad, perfil social. Una vez tengamos determinado el segmento social deberemos crear el argumento de la historia.
- Emocionar; transmitir sentimientos. En nuestro caso la emoción se debería de basar en la salud y la sostenibilidad.
- Definir la percepción que queremos que tenga el consumidor de nuestro producto, que ideas y valores representa nuestra historia.
- Planteamiento, trama y desenlace: Debemos situar al consumidor en un contexto emocional.
- Concretar y definir el personaje que representa los valores de nuestro producto “verduras de Almería”. Hay que concretar y definir un personaje, por ejemplo, un deportista de elite actual (olvidar viejas glorias) ya que debe estar acompañado de ciertos atributos y valores como es el éxito, la heroicidad, la lucha por un objetivo loable, la cultura del esfuerzo, aunque yo prefiero personas anónimas ya que son más cercanas al público, y se sienten más identificadas con él o ella además de ser más auténticos, vulnerables y reales.
Es una obviedad que la infracción, donde el estado de certidumbre se ha convertido en una incertidumbre continua, la situación impacta de forma severa a la calidad, variedad y cantidad de la cesta de la compra del consumidor medio.
Nos encontramos en un momento complejo para el agro en general, de ahí que tener un modelo de “alfabetización mediática” paliaría de algún modo la situación actual. La alfabetización mediática, no es ni más ni menos que la capacidad de acceder y analizar los mensajes en los medios de comunicación y al mismo tiempo crear y actuar usando el poder de la comunicación al objeto de crear y marcar diferencias con respecto a otras zonas productivas.
Cómo impulsar el éxito de Almería: Desarrollo, Alianzas y Promoción
Debemos de buscar la diferenciación a través de la sostenibilidad, la calidad y la responsabilidad social.
Lo que la realidad evidencia es que el agribusinness almeriense requiere de una organización con capacidad para presionar a estamentos nacionales y en Bruselas, defender los intereses del sector, así como de la sociedad allá donde sea requerido. En definitiva, lo que en el mundo anglosajón se denomina como lobby, más allá de la no regulación de esta figura por el momento en nuestro país.
- Desarrollar estados de opinión, realizar estadísticas y estudios de mercado que apoyen el modelo productivo de Almería.
- Crear alianzas con Asociaciones de consumidores de países en destino.
- Invitar a medios de comunicación a que conozcan nuestra provincia y sus bondades culturas, ambientales y gastronómicas.
En resumen, crear y establecer puentes de entendimiento que conecten el origen (la producción) con el destino (el consumo).
El camino por recorrer es arduo pero que duda cabe que tarde o temprano se deberá de acometer por la supervivencia de nuestro sector productivo, la comunicación es poder y el modo de desarrollarla y ejercerla será fundamental.
Y es que ya lo dijo Mark Twain, “hay 3 clases de mentiras: las mentiras, las grandes mentiras y las estadísticas”.
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